lunes, septiembre 26, 2005

Armonía Sonora

FRANCISCO GONZALEZ
Ovalo
Warner Chile - 2002
Todos los temas compuestos, grabados y producidos por Francisco González en Ovalo Portátil. Septiembre 2001 / Marzo 2002.
Mezclado por Oscar López (Ojoparlante) y Francisco González en Estudio Master.
Masterizado por Miguel Bahamonde en Estudio Master.
Dirección de arte: Germán Rodríguez.

Haiku01
Espiral02
Ovalo03
Perdido04
Destinos05
Mercurio06
Kaleidoscopio07
Nada es Permanente08
Constelación09
Almas10
Nº Cinco11
Episodio12

Una circunferencia apropiada, un viaje concéntrico con un destino perfectamente diseñado para el deleite de nuestros oídos y la expansión de los sentidos hacia dimensiones recónditas, secretas, foráneas.

Un viaje, eso es, un viaje intenso, que nos invita a descubrir y soñar, volar hacia una armonía interior, hacía confines que solo ciertas vertientes de la música electrónica pueden lograr producir en cada uno de nosotros.

La propuesta presentada por Francisco González, ex Batería de Lucybell, engloba todo aquello y más. Óvalo es un círculo que divaga a través de 12 composiciones con un alto contenido de lucidez interna, guiado por la experiencia de más de 14 años en el mundo de la música.

La primera placa en solitario de este músico chileno comienza a gestarse en Lucybell, donde incursiona en el arte de la mezcla electrónica, base para gran parte de sus obras.

En este viaje convergen estilos como el funk, hip-hop, electrónica de los 70's, techno barroco, psicodelia y de proyectos electrónicos principalmente de Europa, influencias con las que González busca presentar "las emociones con las cuales vivo y volcarlas a través de los sonidos y los acordes. Es ahí donde puse todo mi esfuerzo y trabajo".

Las creaciones de Francisco González logran una simetría de cuerpo y alma, que subyacen en distintos submundos con una particularidad especial, una personalidad que las hace entes especialmente concebidos y diferenciados unos de otros.

Óvalo nos permite comenzar en un punto llamado Haiku que nos invita a dejarnos llevar por los sonares análogos de su consistencia, pasando por la concepción de Espiral y Óvalo, dos perlas que nos envuelven en una nebulosa dificilmente excluyente, un juego que exprime la agitación que se confunde con la aceleración del flujo sanguíneo.

Perdido tiene la gracia de causar el efecto que nos sugiere el título, introduciéndonos en un paraje impropio, ajeno a nosotros, camuflado que, luego, será una realidad tan tuya como mía. Con un condimento que nos liga a Destinos, una oda que nos fortalece y nos eleva hacía un piso más alto del que ya estamos experimentando, con los sones de una batería intrínsicamente seductora que agita las pulsaciones del silencio.

Todo se divinifica, el sentire del espíritu congregado y aliado a la expresión que Francisco González comienza a dilucidar en Mercurio, un prólogo del climax de este disco, el cual se manifiesta concretamente en Kaleidoscopio, con una fuerza indiscreptiblemente suave y dominadora de principio a fin.

Los viajes lunares son otro toque de poesía inserto dentro de Övalo, manifestado principalmente en Nada es Permanente y Constelación, dos viajes más que elevan el espiritu y lo preparan para dejarse llevar y saborear los acordes electrónicos que se sobrevienen en este intenso recorrido musical.

Almas es el indicio de un recorrido por parajes lunares, vestidos de negro y armoniosamente pintados con colores que nacen a un horizonte lleno de luz, una generosa literatura de bits cargado con un poder doblemente armónico y profundo.

Casi al llegar a la última curva de esta esfera electrónica, N° Cinco mantiene el estilo que sugiere la inmersión del cuerpo en aguas recónditas, vacilando entre la inmovilidad y la velocidad de los movimientos.

El plasma se intensifica en el apocalipsis de esta placa, una sugestión boscoza y llena de vida, de palabras y sonidos desafiantes propuesto en Episodio, el sello hábilmente diseñado para el cierre de la circunferencia bautizada Óvalo.

En suma, un gran disco, una obra que comienza a cimentar los pasos de Franscico González en el mundo de la electrónica nacional, con un propuesta abierta y definida por la armonía de cada composición. Óvalo es un viaje como dije, una invitación al desplazamiento del alma por diversas constelaciones y sensaciones, el mayor éxito de este compilado circunscrito en una esfera sonora y coloreada sutilmente, demostrando que, además de buen baterista, es un excelente virtuoso de la música.

Sugiero la calma de una noche, unos audifonos poderosos y la lectura de "El Vuelo de la reina" de Tomás Eloy Martínez para descubrir las intensidad de este album debut en solitario de Francisco González.

Destacados: Espiral, Perdido, Destinos, Almas

..:: Links Recomendados ::..
[^] Francisco González [^]
[^] Loop [^]
[^] Suburbia [^]
[^] Fotolog Fans Francisco González [^]
[Haz Click en las figuras [^] de los costados para acceder al sitio ]

..:: Bonus Track ::..

Comunicado de Francisco González (martes 31 de mayo de 2005)

Estimados amigos,

Quisiera a través de este comunicado de prensa expresar públicamente mi voluntario alejamiento del grupo Lucybell, del cual fui miembro fundador por 14 anos de mi vida.

Las razones de esta decisión, se deben a mi interés por realizar un proyecto musical propio en el cual vuelque mi crecimiento personal, espiritual y artístico.

Aprovecho esta ocasión para aclarar que, luego de estos largos años de historia y trabajo, mas de 6 discos publicados en el mundo, numerosas y extensas giras por todo Chile, Latinoamérica y EE.UU., llega un momento en la vida en el cual necesito cambios para poder seguir creciendo individual y artísticamente.

Ante todo quisiera agradecer, desde el fondo de mi corazón y de mi alma, a todo el público, mi mas infinita gratitud, que a través de estos años me entregó su apoyo, cariño y todo el respeto que un músico necesita como estimulo.

Me gustaría también agradecer eternamente a los fieles seguidores de Argentina, México, EE.UU. y por supuesto Chile, por su incondicional apoyo, entrega y amor hacia la música de Lucybell.

Gracias también a mi compañía Warner Music, y todas las personas que trabajaron codo a codo con Lucybell, por su confianza y por creer en mi sueño.

Y finalmente quisiera agradecer a todas las personas que hicieron posible la difusión de Lucybell a través de medios de prensa escritos, radio emisoras, televisión, e internet por hacer de Lucybell una gran historia que contar en el tiempo.

Sólo me queda agregar y decir que, parte en mi vida, una nueva y renovadora etapa, ligada al crecimiento personal y búsqueda de un nuevo lenguaje musical y espiritual. Dejo, a todos los amantes de la música en Chile y el mundo, mi trabajo, en las 6 grandes obras (discos) musicales editadas, que estoy seguro perduraran en el tiempo y junto a las próximas generaciones.

También me comprometo compartir con ustedes, en el futuro, las noticias de mis próximos trabajos y proyectos.
Paz, silencio, y entendimiento para todos ustedes.

Profundamente.
Francisco González (ex Lucybell)

Fotos: Internet

En Tus Labios [Esfera]

Una playa acostada en un espacio tranquilo
Adornado con llanuras espigadas y desafiantes
Cortada por surcos al oriente
Entre telas y algodones de difuso sonar
Levantada por olas intranquilas
Humedecidas por la brisa que rebolotea misteriosamente.

Sobre y bajo ellos, la suave brisna de la primavera
Se entrelaza con la benevolencia y el fulgor de la pasión
Que emana desesperada por entre sus delicados pétalos
En directa armonía con la fuente de oxígeno
Magistral que nace del silencio.

Aquella sensación de perdición en las tinieblas
Perfectamente concebidas y pulidas con ciertas sedas
Que caen frente a los soles de esa mañana intensa, por cierto,
Y de un vigor casi inexplicable
Tan solo perpetuada por un trozo de tinta
Y unos cuantos cinceles que esculpen todo el paisaje en rededor
Un campo de rosas y una tasa de té
Dos cómplices de ellos, símbolos de pureza y majestuosa perfección
Como dos magníficos óleos sacros.

La corriente marina que envuelve la vida
Divinificada con la dulzura de un dragón rosado
Un experimentado alfarero y cultor de artes míticas del amor
Permitiendo que los sueños se transformen en perlas de difícil adquisición
Un viaje intenso, desconocido y, ciertamente, inacabable
Por altas montañas de fuegos
Y picos de almíbar y chocolate.

Sus manos congregan a una gran multitud
En mancomunión con un deseo abrigado
Por el veneno rejuvenecedor de sus aguas
Manatiales por excelencia y fuentes de sanidad inmaculada;
Toda su naturaleza converge en ese lugar divino
Posado a los pies del altar, donde la madre ruge sus vientos
Huracanes que emanan desde el centro de su existencia
La que le permite sonreir con gracia y ternura
Un estigma inborrable en la carne débil y dubitante.

Esa esfinge que brilla en su oro negro
Resaltando como un río de sangre
Con la carne sutílmente esculpida
Levantada sigilosamente entre las curvaturas de su oda
Escondiendo las olas de la pasión
El tercer lucero que adorna el espacio
Mandíbulas perfectamente formadas como la luna
Donde se congregan otros cientos de estrellas ordenados celestialmente.

El lugar de ensueño
Una fantasía inacabable
Insaciablemente deliciosa
Un manjar postrado en su eterna nomesclatura
Que dibuja formas y poemas
Que escribe historias
Y te cuenta los secretos del amor.

Esos labios que esconden el silencio por las noches
Que construyen surcos en cada espacio de la piel
Se duermen y despiertan
Brillan y ocultan el sol en sus tierna silueta
Callan y estremecen al viento
Buscan campos alimentados con savia y vid
Son caramelos en una fábula
Son el recuerdo del olvido
Son la tinta que mancha la faz de la lascivia inmadura
Una cátedra a la bienaventurada femeneidad de su ser
Una cántico apológico y consonante
El tiempo envuelto y transgresor
Un baúl donde permanecerá intacto
Una luz en las tinieblas
Y, sí, el epitafio perpetuo y afable concebido por las manos sagradas.

©2005 Amaro Silveira / Esfera
Fotos: Archivo, Internet

sábado, septiembre 24, 2005

Testigo en el silencio

El claustro se abrió, lenta y sigilosamente, desnudando las tinieblas de la noche. El sillón desafiaba al secreto, acomodado frente al cristal frío, explorando una ventana solitaria; una silueta lejana, abrigada por tentaciones mundanas, una escena de delicados contornos y alma enceguecedora.

La vista se posó en el verbo; el olimpo se descubría, con montes vírgenes, labios forjados con pétalos de manzanilla y ojos teñidos con miel.

Frente al escaparate, cada detalle de su naturaleza inmortalizada en la sombra, crespúsculo silencioso, la esencia robada de la realidad.

© 2005 Amaro Silveira
Foto: Jorge World

miércoles, septiembre 21, 2005

Esfera [Esfera]

Despierta, avanza
Enrredado en las sábanas
Entre rombos inclaudicables, aguantas
La mirada obsesiva del viento nevado
Gotas que, de par en par, caban huecos en el suelo
Claman por tu presencia callada
Finalizando aquel ciclo que inicio una semilla
Una luz que guarda el brillo de una estrella alada.

Por la puerta de una bendición sonora
Fuertes brazos acurrucados en tu fantasía
Cobijando cada espacio de tu esencia
Multiplicando los versos cristalinos de alabanza
Masticando el bello cuadro que coronan los pétalos de tu naturaleza
Como una hoja floreciendo en el albor de la primavera
La primera piedra de un ancho y novedoso aposento celestial
Inmaculadamente adornado con hojas de agua y dulces de savia nativa.

Desayuno en el Edén
Cristales abrazados por el vapor
Cereales que nacen hacia el horizonte
Caminan con pasos seguros de pastor
Guiando los tuyos hacia umbrales giratorios y alucinantes
Entregándote al génesis del conocimiento vertiginoso legado del tiempo
Y tus manos acurrucan el calor de la savia perpetua en todo tu ser
Regalo que será de otros tantos futuros misioneros
Que, quizás, no serán recuerdo de tu vigilia canonizante.

Cerca de la puerta descuadrada
Una mariposa reposa tus ojos desiertos
Impávidos, inanimados por la sensación de un final
Marcados por yagas de austera prisión
Como si tu propia cárcel te libera de la esclavitud
Una sensación inacabadamente inexplicable e intangible
Secreto de Dios, marca de luz, miedo y alegría
No supieron las ecuaciones cuadrar esta arremetida voraz
De un sarcasmo de la vida construida bajo el alero de una ilusión
Porque estaba ahí, agitada por la vertiginosidad de su propia carrera
Inagotablemente desesperada y cautivante como el perfume del viento de otoño
Se pierde y se devuelve a su eje primitivo
Te quita el oxígeno y te deja quieto, esperando el perdón
De delitos torpemente emulados por la inexperiencia y el desalojo del amor maternal
Aquel que, con lazos y cuchillas, se encargó de despedazar sueños y tragedias
Todos, sin la mayor premura ni delicadeza
El temor se esfuma como la última palabra que vertiste en mi presencia
Privada de elocuencia y sonoridad
Despiadadamente triste y desesperada
Largamente recordada como nube acaudalada de tormentas y duelos sin cola.

Por aquello que tu mirada quizó expresar
Por aquello que la rutina devolvió al olvido
Y lo atrajo después de inconcientes días de relajo
Por lo que el tiempo quizó y no pudo contar antes de llevarte a los altos picos de la eternidad
Estaba la secuela de una infancia interrumpida
Detenida por la manifestación de un Señor que permitió tu viaje sin destino conocido
Por todo lo que pensé estaba dibujado por tus manos
Por el pequeño trozo de historia que guardo con recelo en una caja de cartón
Por el solo hecho de estar donde no se encontrarte
Por los lugares inciertos, inóspitos, silenciosos de tu tristeza
Por los sueños que no se fecundaron en un pedazo de tierra y agua
Por esos ojos tristes que bendijeron mi vida
Y la trajeron consigo hasta el cuarto menguante de un siglo en génesis
Por todos los rezos de tus manos y los cuentos que erradicaban las penas demoniacas
Por el principio y el fin de la poesía, los saltos y las contraseñas picaras de un espacio completo
Por las noches y el Espíritu Santo que nos congregó en una fantasía inicuamente cortada
Por la magia de una nota y el verso de una estrofa singular y piadosa
Por las mil e infinitas caricias que depositaron confianza en mi camino apasiblemente descubierto
Por los sin querer y los acomplejados juegos de una cancha imperfecta
Porque te vi llegar a la sala donde la luz me vio nacer y mis ojos se abandonaron en tu paz
Por la encarnación que acariciaste una noche de perdón acabado
Por la ternura de tus abrazos en una porcelana frágil y femenina
Por la sana ficción de mantenerte como esfinge y dios de culto
Porque sin ti, yo no sería tú
Porque en un tiempo no muy remoto y tampoco lejano
Escondido entre el oeste y las comedias de Jerry Lewis
En las paternales mañanas de un Pedro y Pablo,
Y las noches de un sueño interrumpido por un manjar de Reyes
Por aquello que perdiste en la lucha y por lo que no conocí
Por lo que te regalo y no quiero acabar por contar
Por todos los santos y los magos fantasmas de cualquier cuento antes de dormir
Por el silencio que nos envuelve y nos hace cómplices
Por tu presencia incolora y sabiamente esculpida con el correr de tu inexistencia material
Por el alma perpetuada en una imagen decorada con una sonrisa
Por los pensamientos que me acercan a tu presencia y los que quieren estar junto a ti
Por la belleza y fortaleza de la mujer que te mantuvo con vida
Por los perros que aullan cuando te acercas a bendecir mis sueños
Por el día que nace en tu boca y muere en tu corazón de almidón
Por el fuego que emerge desde una antorcha en el infinito incontable
Por las materias que no compartimos en una tarde
Porque no hay vuelta atrás
Por sucumbir y levantar las alas
Por respeto
Por anhelo
Por cierta clase de sentir que no se despega de la piel
Por incomprensible que sea
Por supuesto.

Despierta, avanza
El día no se encojerá de brazos cuando le preguntes por el silbido de la noche
La plata estará amoldada con sus formas curvas y desordenadas en filozas puntas
El largo recorrido de los ríos acompañarán el alba de tu esencia
Y cada paso será un emblema que revolotea en el cielo, jugando con tus llemas cansadas
Con tu vibrante luz y la tinta vertida en cuadros inmortales de un album secreto;
Despierta, avanza
En silencio y con la cabeza erguida
Abriendo las penumbras con la espada indeleble
Con los ojos puestos en el horizonte
Rompiedo olas y marcando tierras vírgenes
Descolgando los zapatos inagotables
Permitiendo que los brillos polares no sean la tentativa del abandono
Dejando, por qué no, desfilar muchas sumas y sumas de eterna ficción
Vida, hambre, sed, sangre, recuerdos
Y que los mantos de la lluvia blanca
Se abandonen en cada surco y en cada descanso
Y sean, por fin, diesmo sin tregua ni aflicción.


© 2005 A. Silveira / Esfera
Fotos: Lora, Fotos de Lota, Internet

miércoles, septiembre 14, 2005

Lo que el viento se llevó

La semana recién pasada culminó el plazo para inscribirse en los registros electorales. Soy uno de tantos jóvenes chilenos que no acudió a cumplir con el trámite que te transforma, automáticamente, en ciudadano de este país.

No puedo criticar a mis congéneres que sí están inscritos y menos a los que hace poco tiempo tomaron tal decisión, como ellos tampoco pueden juzgar mi opción de mantener este silencio y alejamiento de la cultura del sufragio popular. Y es simple entenderlo, desde mi punto de vista, pues, hasta ahora, los líderes políticos ven entorpecidos su voluntad y esfuerzos por mejorar la calidad de vida de los chilenos, principalmente por la acción de ciertos resquicios de limitados cerebrales que también tienen un lugar en ese olimpo del poder.

¿Por qué lo digo? Cuando inicié este blog, comenté el tema de los carritos azules que adornan las calles del centro de Antofagasta. No soy el único que piensa lo que en esa oportunidad expresé, puesto que un “prestigioso medio local” – así me enseñaron a nombrar a un diario, canal de televisión o radio cuando no quiero dar a conocer su nombre – publicó una carta de uno de sus lectores, quien aludía al mismo punto que ataque en aquella oportunidad.

Cabe de cajón que todo sigue igual, porque me parece que los diarios son poco leídos o solo revisan las noticias que tienen un título bonito aludiendo a la inauguración de alguna multicancha o sede social, lo cual no es malo pero también hay que preocuparse de toda la población y no solo de una francción.

Al final... se lo llevó no más

Un día viernes 12 de agosto, me enteré por las noticias de una impactante declaración del señor Daniel Adaro, Alcalde de Antofagasta, que se resume en el pago de los sueldos adeudados al personal que controla las cámaras de televigilancia instaladas en el centro de la ciudad y con ello, se saldó el compromiso asumido por la autoridad.

Me refiero a lo siguiente: la alcaldía paso los dineros suficientes para cancelar los sueldos de esos trabajadores hasta que culmine este año y saldó lo que estaba pendiente (3 meses). Claro esta que todo tuvo su “qué”: ya no se van a hacer cargo de cumplir con ese compromiso; o sea, arréglenselas y que otro les pague el trabajo.

Recuerdo que en el verano de 2003, un compañero de práctica entrevistó al Director de la Cámara de Comercio de Antofagasta y este le reveló una serie de irregularidades y desacuerdos entre las autoridades comunales y regionales en cuanto al tema de las cámaras de televigilancia, que era motivo de estudio de todas instituciones antes mencionadas. Por supuesto que nada salió publicado.

Ahora, Adaro no se hará responsable del compromiso de “mayor seguridad a las personas y la disminución de delincuentes en el centro de la ciudad”. Todo se fue a la misma mierda, porque el caballero no seguirá asumiendo esa tarea, que, por los acuerdos sostenidos en el momento de pactarse la instalación de dicho aparataje de vigiliancia, le corresponde a la Iluste Municipalidad de Antofagasta mantener saldada y al día.

Menos mal que tenemos un Intendente que se pone los pantalones y no se mete entre los matorrales para esconderse de ciertos problemas. También se agradece el hecho de tener autoridades comprometidas con esta y otras causas que afectan a gran parte de la población, porque si todo dependiera de la alcaldía, me imagino que esta ciudad sería la pobre del país.

Me pregunto por qué Adaro dijo que el fallecido edil antofagastino, Pedro Araya Ortiz, se robaba plata de la municipalidad, para qué causó tanto daño, por qué promtió tanto y nos quedamos todos barados en el famoso Verano Naranja – reflexionemos: Club de Deportes Antofagasta usa camiseta celeste con blanco, Cobreloa una naranja; el estadio Regional esta pintado con una tonalidad parecida al celeste y el Municipal de Calama de naranjo; los edificios de los colectivos tienen tonalidades verde clara, semejando el color del mar, y en Calama todo esta lleno de tierra lo que da un aspecto medio Naranja. ¿Será antofagastino Adaro? -, en el que se gastaron millonadas de pesos y lo espectacular duró una semana, después solo problemas porque hasta sus propios asesores (me refiero a los consejales) le pidieron rendición de cuentas y pucha que costó que las dieran a conocer.

¿Alguien sabe para quién trabaja?

A fin de cuentas, y como para redondear, las promesas de un candidato a la alcaldía se comienzan a desvanecer en el tiempo. La confianza, desde mi perspectiva, se comienza a evaporar, pensando solo en lso que votaron por él – cosa que jamás hubiese hecho de estar inscrito -. Creo que el tema de la vigilancia en el centro es un beneficio para todos y aquí no andamos buscando estrellas que brillen en el firmamento, porque, de hecho, así como que digamos erradicada la delincuencia no está y falta harto por hacer como para venir a escuchar las charlatanerias del edil antofagastino... ¡Mish!

Antes de tomar decisiones que afecten el funcionamiento de un servicio para la comunidad, hay que comenzar una serie de trámites que aseguren la continuidad de un sistema. Eso es lo que les enseñan a todos en cualquier universidad, colegio, escuela, centro de capacitación, casa, calle, etc.

Es muy fácil tirarle la pelota a Carabineros, si ya con todo lo que tienen que hacer para controlar a todos los animalitos están lo que es copados en recurso humano y económico, ahora el payaso del Alcalde quiere que sea la fuerza policial la que se haga cargo del “cachito” que está dejando.

La verdad es que da mucha pena ver como se pierden votos en gente como esa que está sentada ahora en el sillón municipal; también da lata saber que este episodio hace pender de un hilo al plan caudrante que, hasta la fecha, ha funcionado de “perilla” y los niveles de delincuencia se redujeron considerablemente, aunque no totalmente. Además, se comienzan a postergar los proyectos que suponían la instalción de nuevas cámaras de vigilancia en otros sectores de Antofagasta, como en la Avenida Brasil, un punto donde la delincuencia crece y el redoble de esfuerzos no ayudan a combatirla efectivamente.

Así es. Hasta diciembre están asegurados los sueldos del personal que controla las cámaras de vigilancia del centro de Antofagasta. Por supuesto, no hay sanción alguna para el señor Adaro por esta acción, ciertamente, deshonrosa y descabellada tomada hace ya un mes.

He de esperar que la Intendencia, a través de Jorge Molina y todos sus asesores, consigan los recursos que permitan la continuidad de este importante sistema de vigilancia y la implementación de otros puntos de la ciudad.
Capaz que para las próximas elecciones, la Municipalidad se haga cargo de un nuevo proyecto de vigilancia.

Fotos: Internet

jueves, septiembre 08, 2005

Intro [Claroscuro]

Gota de estrellas luminosas
ilusión espantada de la oscuridad
letras que se dibujan en el espacio
números escritos en la pantalla del televisor
nos miraba como si fuésemos dos perfectos desconocidos
inertes de pasión y toda vida de nuestras venas carbonizadas
de los versos que Freud no puede engranar ni explicar
de forma tal que ni los latidos del corazón puedan tocar los tuyos
es quizá la manera más estúpida de mirar y sentir
lejanía de cuentos bíblicos, que mi abuelo relató de ti
impaciencia extra orvitante en medio del desierto árido de la pampa que acongoja a las almas
las estructuras que mueren en tu ser, botadas en el camino sin luz están
esperando la llegada de un momento caucásico, pleno de gloria
como solo tu externidad puede amar en los pilares que sostienen mi mundo
homeopatía de carruseles oxidados por el viento y el tiempo sin saber de...
de esa flor que se marchito, se quemo y cenizas fue
ardientes de pasión natural presente
como un recuerdo del pretérito de tus senos
cálidos y pequeños, crisantemos, aguas cálidas que albergaron mi ser
la tierra loca y lúdica que desborda la intransigencia motora
el vuelo de los pájaros en busca del viento que los lleva a la inmensidad de tus entrañas dulces
miel cualivicente que engaña mi voz y mis manos
el fuego crepitante dando toques de magia y colores de un árbol frente al espejo
la luna desordenada, ensordece la matriz del movimiento
un escritor y un psicólogo discuten el caos del big bang
una superpotencia compra la burra que da pan y trigos ciegos
no es que sea un implorante deseo sin sanar
es el crepúsculo de un diamante casi inerte
despertando en fértil incongruencia
malabares de payasos que ven tras cada movimiento
el alcohol que sanará la inaudita herida
el vaso sucio y trizado que tiene el corazón
cuando los animales pisotean mis sueños y los pudren sin ideales
la misma que tienen los dibujos privados de cuerpo
no esta, simplemente no están, es mi culpa quizá
reacciones en cadena mutados de danza pretoriana
y como saberlo, si la sal ya no es alegre
ácida de cuerpo y sentimiento
algo vibra pero no tiene movimiento
algo que vive y muere en un contar del segundo que no estás
porque el porcentaje de una ciencia no es real
preguntándome si lo real es falso
y si tus ojos ven la lagrima que en una sonrisa esbozo
te pediré perdón y rechazo, comprensión y migajas de odio
pediré por tu voz que consuela el tiempo
pediré que las teclas de un jarro no mueran en tus labios
que sólo la cálida estupidez sea prima de tu sueño
los ángeles besarán el impacto que un ave hará en tu cielo
y que no sea canalla la obsesión
simplemente un dulce y velas vigilando el paso de los caminos
porque es mi padre el que, acuartelado, tensa el momento
suficiente de dejar de amarte
una línea delgada que no romperá ningún muro y ningún fracaso
porque el sol se detuvo al mediodía y no dejé de aclamar tu nombre
y no procurare pensar el los triunfos y los fracasos del tiempo pretérito
porque es un juego que el tiempo hace con tu vida
la envejeces y la amo sin amaneceres, el alma está siempre en ti
acciones veloces, orgánicas y coincidencias que no borran mágicamente
eso que nuestras vidas unió...
desapareces, te vas y vuelves, desperté del viaje humano de amarte sin pastillas
y sin pensar en el futuro... sólo tu imagen, víctima de la belleza, estimula mi respiración...el mundo no deja de ser blanco ni negro, ni bueno ni malo, ni deja de pensar que existes en algún lugar o una calle, que espera la espera desesperada...


[© Enero 25, 2000 / Poema 1]
Fotos: Kute, Jorge World

miércoles, septiembre 07, 2005

Desiderata

Camina plácido entre el ruido y la prisa, y piensa en la paz que se puede encontrar en el silencio

En cuanto sea posible y sin rendirte mantén buenas relaciones con todas las personas. Enuncia tu verdad en una manera serena y clara; y escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante; también ellos tienen su propia historia. Esquiva a las personas ruidosas y agresivas, ya que son un fastidio para el espíritu. Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargo; ya que siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tu. Disfruta de tus éxitos, lo mismo de tus planes. Mantén el interés de tu propia carrera, por humilde que sea; Ella es un verdadero tesoro en el fortuito cambiar de los tiempos. Se cauto en tus negocios, pues el mundo esta lleno de engaños.

Mas no dejes que esto te vuelva ciego para la virtud que existe. Hay muchas personas que se esfuerzan por alcanzar nobles ideales. La vida esta llena de heroísmo. Se sincero contigo mismo, en especial no finjas el afecto y no seas cínico en el amor, pues en medio de todas las arideces y desengaños, es perenne como la hierba. Acata dócilmente el consejo de los años, abandona con donaire las cosas de la juventud. Cultiva la firmeza del espíritu para que te proteja en las adversidades repentinas. Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad; Sobre una sana disciplina, se benigno contigo mismo. Tú eres una criatura del universo, no menos que las plantas y las estrellas; tienes derecho a existir, y sea que te resulte claro o no, indudablemente el universo marcha como debiera. Por eso debes estar en paz con Dios, cualquiera que sea tu idea de Él, y sean cualesquiera tus trabajos y aspiraciones, conserva la paz con tu alma en la bulliciosa confusión de la vida, aun con toda su farsa, penalidades y sueños fallidos, el mundo es todavía hermoso. Sé cauto. ESFUÉRZATE POR SER FELIZ...


[Hallado en Baltimore, en la vieja iglesia de Saint Paul, en el año 1692]
[Para Rodrigo con amor, Hugo. Antofagasta, 31 de diciembre de 1991]
[Escrito por Hugo Reyes Codoceo, el día antes de viajar a Brasil con mi madre, dos años antes de su partida. Dic 1991]
Fotos: Kute

Vereda [Esfera]

He la ahí, posada frente a los ojos tímidos
En un pasillo donde la luz se mezcla con su silueta
Su rostro cuenta los minutos amargos de un episodio incrustado en su carne
Tersa y envejecida a la vez, por las lágrimas cuajadas en su corazón
Maldiciendo, sin saberlo, a la semilla fecundada de su ser.

Sus ojos agrietados por el insomnio,
Complementados con la agria presencia de una matriz desquiciada,
Permiten aunar sollozos en una represa inundada
Por la insertidumbre de su insípido devenir.

Sin embargo, una sonrisa rompe los vasos cristalizados con vinagre
Sin saberlo y sin conocer futuro común
Pues, la rutina de sus pasos jamás se han topado con su infancia intranquila;
Hasta ahora, un fantasma acostado en medio de un desierto poblado por inhóspitos labradores de la tierra
Aquellos que marcan surcos en todas las planicies
Y levantan montañas en las llanuras del verbo.


Una historia dividida por los tormentos del alta mar
Condujo al empobrecimiento de mi alma
A desnudarla en la fragilidad de la conciencia
Sostenido en la inocencia que su mirada inmortalizó en mi espacio
Una mortificación inesperada
Reflejada y condensada en una lluvia de pensamientos volátiles, descontrolados e inútiles
Para cualquier pretensión de ayuda y calidez corporal.

Cuando sonaron las campanas de aquella cúpula gris,
Pensé en decir alguna barbaridad que acogiera la pobreza de su melancólica humanidad;
Mas, de palabras no se alimenta ni sobrevive un alma en el desierto
Aunque, quizás y muy a mi pesar,
Ellas pudieron limpiar la pena acaecida en cada uno de sus rincones.

Algo parecido a un ángel acalló el espacio
Lo dejo mudo y sin vida, inmoratlizado en un cuadro nublado
Pendiente de la presencia del arco iris que esa figura pudo plasmar en sus ojos
Cayéndose a pedazos por el infortunio de la misma vida;
Desapareció como el canto ahogado en el ocaso del día
Como polvo volando por la corteza del mar embravecido.

No supe que pudo ser de sus pasos ni donde encaminó el destino de su desnudez
Porque en la calle no podemos descubrir más que le semblante de una cruda tristeza
Enmarcada en un segundo o una visión paralelamente distante;
Cuenta regresiva, su presencia se hizo material en el alba
Antes de emprender el vuelo hacia el este
Y supe, por fin, que en los sueños de un niño está la bonanza de la tierra
Circunscrita entre montes algo desvalijados por el paso del tiempo
Porque en ellos está la respuesta indiscreta y burlona
Capaz de enderezar hasta el más fiero árbol anclado en el camino.

Pensé, entonces, en encumbrar una sinfonía de fantasías al fantasma perdido en el espacio
Y adornarlo con pétalos de agua y cenizas de inocente perdición
De modo que blanco y negro sean conjunción y hablen dialectos mitificantes
Para así, trascender el portal de sus ojos y la misericordia de sus manos
Aquellos dos que se guardan en un libro escarchado por la resonancia del corazón emergiendo desde el último rincón de sus labios benditos...

[© Agosto 30, 2005]
Fotos: Kute

martes, septiembre 06, 2005

Crucifixión [Esfera]

El sol decoró el horizonte con sus suaves tonalidades
Transitando entre el refulgente amarillo de la luz cegadora
Y el rojo de la sangre ebullendo de las cataratas del corazón;
Por supuesto, el calor de su ser agitó el contorno de mi cuerpo
Dejándolo con un sudor casi escalofriante y asqueroso
De aquellos que solo una fiebre de invierno puede patear sin precausión alguna.

Eran casi las ocho de la mañana, un viento frío intentaba mediar en la pugna instaurada entre el cielo y la tierra
Los minutos corrían presurosos como corceles de un apocalipsis jamás imaginado en los sueños
Que, hasta ese momento, no eran presagio de desgracia alguna
Parecían mas bien, bendiciones y caramelos de alguna deidad majestuosa
Sagrada por decir lo menos;
Los ruidos de la ciudad comenzaban a martillar las paredes de la cárcel inserta dentro de un plano maqueavélico
Algo parecido al rechinar de las ollas contras las piedras de un camino incansablemente agotador.

La mañana no quería callar su epitafio premeditadamente construído en una fragua mortal
Donde el alma no transita sin dejar su cuerpo impávido sembrado en un desierto incauto o inherte
Manchado con ciertos colores anormales y pigmentos que parecen venir de la desgracia.

El café de aquel día concentraba todo el destino aun desconocido
Estaba negro y opcao, agrio y desbastador, sucio y cuajado en su piscina de porcelana barata
Sin un atisbo de alegría, perdido en su propia realidad y esperando el momento para esfumarse en alguna glándula oculta a los ojos humanos.
El frío del cuerpo traspaso el umbral de lo desquiciadamente presente, de lo humanamente soportable
Al tiempo que el sol golpeaba la ventana sin el mínimo respeto por la quietud del ambiente
Intentando resquebrajear el destino, el presente, el pasado y todo cuanto poseía.
Aun no tenía conciencia, pues,a letargado como estaba, pensaba aun en el sueño desnudo de la noche anterior.

Sí, intentaba recordar rostros y acciones,
Porque parecían increíblemente despanpanantes
Y, ante eso, cualquier intento por quebrar la tensión de ese climax
Era una sórdida pérdida de naturalidad, o, mas bien, una aguja dispuesta a acurrucarse en un rincón de la cama.
Mas pronto que tarde, todo aquellos ruidos molestos
Entendieron que la plácida virtud del ser no estaba en el tormento de la mañana
Se encontraba disvariando entre el fáctico complemento del oxígeno y la fatalidad de un recuerdo masticado con pétalos de manzanilla.

El correr de los minutos, un sórdido y despiadado dolor en lo alto de los montes
Gatillaron el último disparo de un revólver caucásico y escondido en la maleza del cuarto
Que, para ese entonces, ya se tornaba cada vez más tempestad y gritos desde la penumbra del olvido y el temor
Pensando cómo se siente estar vivo, inmerso dentro de una burbuja de sabrosos aromas
Y vertientes de aguas cristalinas y dulces
Bebidas que inundan el alma con manjares y lo visten de pomposos harapos de miel.

Mas, el desenlace no bastaría para atardecer el silencio
Tampoco para acallar al corazón sosegado por la vertiginosa carrera de un mandamiento apocalíptico;
En ese cielo resquebrajeado, se escondia la tradición infundada de un verso de hiedra
Un veneno desperdiciado por la somnolencia de una grieta invisible en la historia
Y, de por sí, tentador como las garras de un demonio incauto
Apoderándose de cada sigiloso paso que transcurre en la tinta teñida de rojo.

La espina que punzó la eternidad
Fue el colapso del cielo, la tortura de la noche desolada
El martirio de un sentimiento, de un proyecto o una pintura a medio terminar
Una casa cayéndose a pedazos
La noticia que enmudece al semblante acariciado por la crema de sus ojos
El destino cubierto por una gruesa tela de grises manos
Un caleidoscopio manufacturado por una insensible oración cuadriculada
El último súspiro de las líneas de un cuaderno abandonado en un closet.

Sentado ahí, impávido y asustado, la negra maldición pareció desgarrar la carne
Los sueños que se transformaban en cenizas viajando hasta el cubículo de tierra
Incrustado en el tallo de una rosa marchita por la niebla y por cruenda realidad
El deseo que rebaso el límite de los permitido,
El sabuezo que masculló los caminos llenándolos de ahogantes tentaculos de maldición desfundada
Carma que se asfixia en el pensamiento y en la calma de una cruce de miradas perdidas.

La vista perpleja en un punto desconocido
En el sacrilegio de los templos sagrados de la carne
En la invasión al perpetuo verbo del Edén descubierto por aprendices manos
Esperando que los látigos se incrusten en cada pedazo de piel y la desgarren como el fuego dilata la madera en una hoguera
Asfixiando todo cuanto vida tendría que dejar de resplandecer
Si acaso alguna vez logró llegar a la cúpula de la inmortalidad
Añorada en ese preciso momento
Cuando, justamente, un centinela del mal se encarga de hacer presente su custodia de cuanto vibra en el ser
Desde las entrañas hasta el génesis de la lid.

Aquella noche en que la inocencia se marchitó
En la que los pequeños sorsales crecieron en una carrera desenfrenada por alcanzar la cúspide de la cordillera
Donde se vistieron de un alba jamás conocida
Y se presentaron como delicados toques de cristal resplandeciente
Como gotas de manatial
Ahora, comenzaban el pesar de la muerte incondicional
Imprenetrable, despiadada e incurable,
Donde solo un grito puede acabar la condena de la confianza y la esperanza
Un aullido lejano, solitario, silencioso, doloroso,
Tentador para los débiles y mortificante para la sólides del paraíso.

¿Opciones? No las hay
Están tan enterradas en la ansiedad de una mirada ausente
Como pronto lo estarán los huesos que serán rescatados de su perdición,
Pues, el maldito demonio inmune no perdonó los pecados del placer
Los convirtió en una pesadilla sin regreso
En una trama cortada por las tijeras del destino
La transformó en lava que destrona a los cautos
Los desviste como la tarde se encarna con el cuarto menguante que no volveré a presenciar
De la historia que será arrojada al mar
Con un final irrefutablemente asqueroso y despreciable
Estático y débil colgado de un río de coagulos de vid.

El nombre qudará plasmado en un tatuaje condenatorio
En aquella sala fría, iluminada por una luz pálida como el rostro infertil en el lecho
Allí estará la última letra de una nota que entonó himnos
Que masculló el arado de la tierra y cultivó trigos en vidas perfectas
Y, antes de caer en su propia trampa, la mesa de papel
Se derrumba como un palacio de naipes negros.

Cuando ese momento llegué, te guardaré un lugar en mi casa
Te esperaré con una taza de café caliente y una rebanada de amor
Pues, si la inocencia es parte de la estupidez
Y las tinieblas son el cuadragésimo segundo de la vida
Entonces, comprenderé que ese pulgar en alto
Es la guarida que aguarda la sonrisa de un consuelo eterno
En medio del desierto acallado por el soplido de la arena;
El fuego enmarcará tu historia en un testamento
Para que los demonios inmunes no vuelvan a escribir trozos en algún diario de la prensa local
O en la historia de algún buen pasar...
[© Septiembre 5, 2005]
Fotos: Kute, Jorge World

Cuartel [Destellos]

Hoy te encontré en un sueño de contornos azules
Suaves como la miel de tus labios
Un pequeño suspiro de la realidad inventada por la naturaleza de la imaginación
Te toque con las alas del espacio
Te sentí con el sexto sentido de las olas que vibran en mi alma
Allí donde las cadenas me aferran a este amor que no sé controlar
Que se desborda de los contornos de la fuente de tu dulzura
Aquella que se pierde entre mis manos con el adiós doloroso de una espina incrustada en el ombligo de mi corazón
Y desde los aposentos de la tristeza, una gota emana de los luceros que brillan en el cielo de la fantasía
De tener el encanto de tu sonrisa acariciando mi vista, llenando todo de una suave brizna y fulgor
Allí donde forjaste la eternidad de este sentimiento que es trigo y miel
Es inconfundiblemente la quimera de una ilusión y de un sueño
Que emerge desde las nubes suaves como tus manos de porcelana
Entre las caretas póstumas de un diluvio eterno de mis ojos
Que acallan el delirio del silencio y de las tinieblas
Escribiendo con la sangre que emana de los confines del pecho apretado por el llanto, el dolor
Sólo amarte no es un consuelo
Porque te extraño como se extrañan las estrellas en la noche de luna llena
Como se extraña el cuarto menguante reflejado en la arena que nos vio nacer
Te amo, porque no sé desprenderme de tus cadenas
Y no sé amarte de otro modo, así, con toda la imperfección que rodea mi mundo...

[© Noviembre 15, 2002]
Fotos:

lunes, septiembre 05, 2005

Serenata al Verbo [Un Minuto de Silencio]

Cuan difícil comprender el misterio de la muerte
Que oculta de la realidad a la vida y florecen campos de lágrimas
Cubriendo el mentado ambiente, dificultosamente visible
Tapado por las nubes de la razón, por el semblante vertiginoso de la locura
De la desesperación que se apodera del corazón
Y siendo víctima de los minutos posteriores, se adentra la culpa de las palabras que no se escribieron en la boca.

No quiero que las tinieblas nublen el horizonte
Que dejen en cada movimiento, el rastro amargo de una utopía
Aquello que se construyó y se esfumo sin aviso
En el miedo, la sangre perpetua el estigma de culpabilidad
Una espina encallada en el abismo que convoca el futuro
La perdición sin rumbo, amalgama de ensueño desesperada
Una sonrisa, una caricia de la última expresión del suelo
Dios tocó la claridad para transformarla en el presente de mi vida.

Más allá de un canto
Hay un grito desesperado del alma claudicada
Verso y ministerio adormecido, visiblemente estrangulado en el podio de un umbral taciturno
Este silencio que emerge desde la profundidad de la gravedad
Que interfiere el hábito consuelo perverso
Un extraño pedazo de la tierra que se escapa de mi ojos
Confraternizando su estupor y su generosidad con el poder del aire que penetra los poros
Integridad resumida y caucásica, versículo impuesto por el destino inicuo
Más allá de un gesto tranquilo, se consume el rastro de las cenizas acaecidas en el sendero claroscuro.

Este es el epitafio que viene a recordar que soy pequeña luz en el mundo
El desenlace en que gastamos la vida, pierde todo espasmo de razón Sacrificio y recompensa abnegados, silenciosos, vestigio de amor
Soliloquio de un tesoro que no reconocemos sino en el filo del abismo Todo marcha en un inconsecuente, inconexo y enredado plano virtual de circunstancias
Talladas en una hoja virgen, de aroma a pérfida dulzura y angustiado dolor.

Más bella que nunca, más delicada que la flor que llega a adornar el cetro de descanso eterno
No quiero llegar hasta el último minuto para contar cuantas espinas se clavan en el pecho
Tampoco quiero penetrar el diván donde descansa el espectro tenebroso que ronda la vida
Y que las manos se alcen al vuelo para apuntar el pecado de un nativo cien veces sin conciencia
Ahí estaré oculto, en un rincón, donde siempre he pretendido estar
Allí esperaré para que te levantes y me abraces
Para que tus manos se deslicen por mi piel, me acaricies y me lleves contigo
Y seguiré siendo un pequeño retoño orgulloso y egocéntrico.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo
Este es el elogio que se traba en mis pensamientos, en mi boca
Que nace de la cálida noche de primavera, que emerge desde las profundidades de este mundo ennegrecido por la nebulosa que he construido
Aquí estoy, volviéndome una artimaña y un recuerdo
Sentado a la derecha de la pasión, el vértigo y la devoción hacía cuan magnifica escultura heredé de Dios
Puesto que no hay más que dulce en tus párpados, en el soliloquio de tu presencia y tu aura
Celestial oración, verbo de la vida, esculpiendo la vida a fuerza de sangre y testimonio
No sabes el estupor que se atasca en mi pecho al verte cada mañana revitalizada por los colores santos
Por la gracia que de tus pasos emigran para ser absorbidos por el aire en mis pulmones.

Estas cenizas son el fruto y son el andar de un quijote y una promesa cerrada
Que se esgrime amor, que se traduce en lenguas de fuego
Cosa mía, perfecta conjunción, sagrado cuarto menguante
Ahora es nunca y mañana será la voz que quiere llorar tu presencia de miel
No quiero que el sol se extinga tras de ti
Y no quiero contar las lágrimas de una tarde para saber cuanto te amo
Porque este es el sollozo de un alma y un espectro devoto, versátil, traducción de tu ser
Escondido en el silencio te regalo una flor de letras incansables...




[
© Mayo 22, 2003]
Fotos: B&W Dreams, Internet