miércoles, octubre 19, 2005

Cíngulo [Péndulo II]

Una transmisión telepática. Fuegos cruzados envueltos en seda alba como sus pechos delicados. Cada contorno erizaba la piel, la desbordaba en caricias angelicales, perdidas en el vértigo adrenalínico provocado por el suave movimiento de sus caderas. Mis brazos encadenaron la perdición de su verbo inagotable y puro; las velas se consumieron con el último lucero de la noche y sus piernas evocaron versos inmortales en la memoria, abrigando un secreto insaciable e inborrable en los ojos.

©2005, Amaro Silveira
Foto: Internet